La salida de la imagen de Jesús Nazareno del Consuelo del templo de la Recolección inauguró este sábado las procesiones de Semana Santa. Este mismo día sale también el cortero de la imagen del Niño Jesús de la Demanda.

Con la salida de la imagen de Jesús Nazareno del Consuelo del templo de la Recolección arrancan las procesiones de la Semana Santa.
A las 10 horas salió de la Iglesia La Recolección el cortejo procesional que recorrerá más de 70 cuadras a lo largo del día.
La imagen de Jesús Nazareno del Consuelo cumple 160 años de salir en procesión, práctica que inició el Domingo de Ramos del 24 de marzo de 1850.
Entre tanto, a las 11 horas salió de la Iglesia La Merced, la pequeña imagen del Nazareno de La Demanda en un recorrido de unas 40 cuadras del Centro Histórico capitalino.
Se trata de una pequeña escultura de Jesús Niño con la cruz a cuestas que muestra el sufrimiento de la pasión, la cual es sacada en procesión desde 1955.
Se cree que esta imagen fue elaborada en 1731. El nombre de la Demanda se debe a que en época de la colonia era enviada a las casas de familias generosas en demanda de ayuda para sufragar los gastos de la procesión de Jesús Nazareno de la Merced.
La que hoy se conoce como la parroquia santísimo nombre de Jesús, templo de la recolección, era el colegio del cristo crucificado, trasladado a la nueva Guatemala de la Asunción seis años después de su destrucción en la ciudad de santiago de los caballeros, según acta del 29 de junio de 1779.
El arquitecto Pedro García Aguirre elabora los planos del templo en 1797, y se inicia la construcción en 1845 es bendecido por el obispo Comayagua, honduras, monseñor Francisco de Paula campoy y Pérez. El martes 25 de diciembre de 1917 un fuerte terremoto destruye gran parte del templo. Le sucede un nuevo movimiento sísmico el sábado 29 de ese mismo mes y dos mas producen el jueves 3 y jueves 24 de enero de 1918, echando por tierra los que había quedado en pie. En 1923 comienza la reconstrucción del templo y lo toma a si cargo la orden Franciscana de Cartagena. El sábado 3 de septiembre de 1949 se realiza solemne inauguración y bendición del órgano, por el Nuncio Apostólico Emilio Castallani, O.F.M. Al día siguiente se bendice el crucero, por el arzobispo, Monseñor Mariano Rossel y Arellano. El 4 de febrero de 1976 un nuevo terremoto destruye parte del templo y convento. El 13 de junio de 1978 se bendice y se abre de nuevo al pueblo. Este templo neoclásico resguarda las consagradas imágenes de Jesús Nazareno del Consuelo y la Santísima Virgen de Dolores.
Procesión de Jesús Nazareno del Consuelo.





La Santísima Virgen de Dolores



Los Trajes Cucuruchos y Penitentes:
Se trata de largas túnicas, moradas para los días previos, y negras para el Viernes Santo, que se complementan con esclavinas blancas, cinturones que ciñen las túnicas y que representan la autoflagelación, y un capirote para cubrirse del sol y la lluvia
Los trajes morados, los cucuruchos, como se denominan los devotos que participan en las procesiones por las caperuzas que usan, acompañados de sus familias, en muchos casos hasta con hijos pequeños en brazos, año con año cargan las gigantescas y pesadas andas que muchos meses antes son elaboradas por las hermandades de las diferentes parroquias del país.
El traje talar utilizado por los cucuruchos en Guatemala tiene una larga trayectoria. Su origen se remonta a los primeros trajes de peregrinos utilizados en Europa, hacia el siglo IX, cuando recorrían los lugares sagrados del centro europeo y, sobre todo, a partir del siglo XI, cuando visitaban los lugares santos en Medio Oriente.
Esta indumentaria estaba ligada a la utilizada en conventos y abadías. Otra influencia fue el traje de peregrino establecido por la orden franciscana, a partir del siglo XII. Estos ropajes tuvieron amplísima difusión en toda Europa. En España se volvieron comunes, sobre todo en las peregrinaciones a Santiago en Compostela.

La vestimenta del cucurucho en la actualidad se compone de una túnica morada, para los días de Cuaresma y Semana Santa, o negra, para ser utilizada en las procesiones de Viernes Santo. Lleva una esclavina morada o negra, también llamada paletina, que es una sobrecapilla que se coloca en los hombros, como símbolo de penitencia y deriva directamente del penitente del Santiago de Compostela.
La esclavina de Jesús de Candelaria, usada el Jueves Santo, es blanca para conmemorar la institución de la Eucaristía y porque en 1597 le fue concedido, por bula papal de Inocencio IV, el privilegio de utilizar dicho color. Para ceñirse la túnica se usa un cíngulo o cinturón morado, blanco o negro según la simbología del día, que recuerda la autoflagelación con el que se castigaba el cuerpo, en tiempos coloniales, y que era también portado por los caminantes de Santiago de Compostela. El traje se completa con un parasol también negro o morado, según el día y la procesión. Algunas variantes son los “cascos romanos”, forrados de tela morada, como en Candelaria.













Han Transcurrido 80 años desde que abrió sus puertas, y muchos de quienes ahora lo visitan acudieron por primera vez de la mano de sus padres o sus abuelos, después de una procesión de Semana santa. 